Variedad de bebidas energéticas
Drinks which accelerate your heart
Es suficientemente conocido por todos, los efectos de las llamadas bebidas energéticas. Dado su alto contenido en cafeína y taurina, que es hasta tres veces superior al contenido en una taza de café o en una bebida de cola, van a provocar un aumento de la contractilidad cardiaca, provocando un incremento de la frecuencia cardiaca o taquicardia, palpitaciones, aumento de la presión arterial y, en los casos más graves, convulsiones o muerte súbita. Generalmente estos efectos secundarios más graves se han presentado sobre todo en aquellos casos de jovenes con patología cardiaca previa o de base y que se ven alteradas o agravadas con la ingesta masiva de estas sustancias, como así sucedió en EEUU, donde se investiga la muerte de 5 chicos tras el consumo de una marca en concreto de estas bebidas. En esta investigación parece ser que dicha bebida alargaba el intervalo QT (según la Asociación Americana de Cardiología, se han realizado estudios en los que dicho intervalo es hasta 10 milisegundos más largo en aquellos consumidores de bebidas energéticas) que podría ser la causa de la muerte de estas personas.
En los últimos años, el consumo de estas bebidas se ha disparado, asi las bebidas energéticas representan una industria multimillonaria que crece día a día. Mientras que los adolescentes y adultos jóvenes han sido tradicionalmente los mayores consumidores, en los últimos años a más personas de todos los grupos demográficos se han iniciado el consumo de bebidas energéticas, incluido algunos deportistas las ingieren durante los entrenamientos.
Un informe de 2013 de la Administración de Abuso de Sustancias y Servicios de Salud Mental afirma que en los EE.UU. desde 2007 hasta 2011, el número de visitas al servicio de urgencias relacionadas con el consumo de bebidas energéticas casi se duplicó, pasando de 10.068 a 20.783. La mayoría de los casos fueron identificados entre los pacientes de 18 a 25 años de edad, seguidos de los de 26 años a 39.
It´s sufficiently known to all the effects of the so-called energy drinks. Given its high content of caffeine and taurine, which is up to three times the content of a cup of coffee or a cola drink, they will cause an increase in cardiac contractility, causing an increase in heart rate or tachycardia, palpitations, increased blood pressure and, in severe cases, seizures or sudden death. Generally these more serious side effects have occurred primarily in cases of young people with previous heart disease and affected or aggravated this problem by the massive intake of these substances, as happened in the U.S., where the deaths of 5 kids under investigation after the consumption of a particular brand of these drinks. In this investigation it appears that the beverage lengthened the QT interval (the American Heart Association reveals that studies were performed in which the interval is up to 10 milliseconds longer for those consumers of energy drinks) could be the cause of death of these people.
In recent years, the consumption of these drinks has skyrocketed, so energy drinks are a billion dollar industry that is growing daily. While teenagers and young adults have traditionally been the largest consumers, in recent years more people of all demographics have started drinking energy drinks, including some athletes ingest during workouts.
A 2013 report from the Administration Substance Abuse and Mental Health states that in the U.S. from 2007 to 2011, the number of emergency room visits related to energy drink consumption almost doubled, from 10,068 to 20,783. Most cases were identified among patients 18 to 25 years old, followed by 26 to 39.
Este aumento de la contractilidad cardiaca ha podido ser demostrado mediante técnicas de imagen, en concreto en el día de ayer, 2 de Diciembre de 2013, en la Conferencia Anual de la Sociedad Radiológica de Norteamérica (RSNA) se presentaron en Chicago los resultados de un estudio realizado por el residente de radiología, Dr. Jonas Dörner, de la sección de imagen cardiovascular en la Universidad de Bonn, Alemania, y como investigador principal del estudio consta el Dr. Daniel K. Thomas. En este estudio, aún en curso, titulado «Caffeine and Taurine containing Energy Drink improves systolic left-ventricular contractility in healthy volunteers assessed by strain analysis using Cardiac Magnetic Resonance Tagging (CSPAMM)«, el Dr. Dörner y sus colegas usaron imágenes por resonancia magnética cardiaca (MRI) para medir el efecto del consumo de bebidas energéticas en la función cardiaca en 18 voluntarios sanos, entre ellos 15 hombres y tres mujeres con una edad media de 27,5 años . Cada uno de los voluntarios se sometió a una Resonancia Magnética (RM) cardíaca antes y una hora después de consumir una bebida energética que contenía taurina (400 mg/100 ml) y cafeína (32 mg/100 ml).
En comparación con las imágenes de referencia, los resultados de la RM cardíaca realizada una hora después de que los participantes del estudio consumieran la bebida energética revelaron significativamente una mayor deformación y una alteración de la velocidad del pico de la deformación sistólica (utilizados como criterios de medición de la contractilidad) en el ventrículo izquierdo del corazón. Así mismo se recoge en dicho artículo que no se sabe exactamente cómo se produce dicho aumento o si esta mayor contractilidad es comparable a la provocada en el corazón por las actividades diarias o el rendimiento deportivo tras el entrenamiento continuado.
This increase in cardiac contractility has been demonstrated by imaging techniques, particularly in yesterday, December 2, at the annual conference of the Radiological Society of North America (RSNA ), in Chicago, the results of a study presented by the radiology resident, Dr. Jonas Dörner, section of cardiovascular Imaging at the University of Bonn, Germany, and principal investigator of the study consists Dr. Daniel K. Thomas. In this study, still in progress, entitled « Caffeine and Taurine Improves Energy Drink container containing left- ventricular systolic contractility in healthy volunteers strain analysis using Assessed by Cardiac Magnetic Resonance Tagging ( CSPAMM )» Dr. Dörner and colleagues used resonance cardiac magnetic (MRI ) to measure the effect of energy drink consumption on cardiac function in 18 healthy volunteers, including 15 men and three women with a mean age of 27.5 years. Each volunteer underwent prior cardiac Magnetic Resonance (MR ) and one hour after consuming an energy drink containing taurine (400 mg/100 ml ) and caffeine ( 32 mg/100 ml ) .
Compared to the reference images, the results of cardiac MRI performed one hour after the study participants consumed the energy drink revealed significantly higher deformation and alteration of the speed peak systolic strain (used as criteria measurement of contractility) in the left ventricle. Also stated in the article that it is not known exactly how this increase occurs or if this increased contractility is comparable to that caused in the heart by daily activities or sports performance after continued training.
Además se recoge la necesidad de realizar más estudios para entender este mecanismo y para determinar cuánto tiempo dura el efecto de la bebida energética, ya que en este estudio se ha visto el efecto de un consumo puntual, pero no se sabe que efectos puede tener el consumo continuado de estas sustancias a largo plazo. Por último, los investigadores no encontraron diferencias significativas en la frecuencia cardíaca , la presión arterial o la cantidad de sangre expulsada por el ventrículo izquierdo entre la RM antes del consumo por parte de los voluntarios y la realizada una hora después de la ingesta de la bebida.
Otra propuesta que nos hacen los investigadores sería la necesidad de realizar dichos estudios en personas con patología cardíaca de base, ya que los cambios apreciados en personas sanas, no se sabe como pueden afectar a pacientes con arritmias cardíacas previas, ya que la contractilidad cardíaca aumentada podría desencadenar un cuadro de estas arritmias que si es severo y no revertida puede llevar a un cuadro de muerte súbita. Por último, los investigadores advierten que se necesitan estudios adicionales para hacer frente a los riesgos que plantea el consumo de bebidas energéticas en combinación con el alcohol.
Besides the need for further studies to understand the mechanism and to determine how long the effect of the energy drink are, as this study has been the effect of an occasional consumption, but it is unknown what effects may have taken up the continued use of these substances long-term. Finally, the researchers found no significant differences in heart rate, blood pressure or the amount of blood ejected by the left ventricle between MRI before consumption by volunteers and made one hour after ingestion of the drink.
Another proposal that make us the researchers would need to conduct such studies in people with cardiac pathology, as the changes seen in healthy people, it is unclear how they can affect patients with previous cardiac arrhythmias, since increased cardiac contractility could trigger a picture of these arrhythmias if not reversed severe and can lead to sudden death box. At the end, the researchers caution that further studies are needed to address the risks posed by the consumption of energy drinks in combination with alcohol.
Desde amplia-mente.com queremos advertir que estas bebidas energéticas, tan utilizadas por nuestros jovenes actualmente, no siempre son inocuas o simplemente «revitalizadoras» tras largas fiestas, sino que como todo debe consumirse con mesura por sus efectos cardiotrópicos. Además queremos alertar a aquellos que padecen algún tipo de arritmia cardiaca que no deben de tomar este tipo de bebidas dado que pueden ser un desencadenante de uno de estos cuadros que si no es revertido pueden acabar en muerte súbita.
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